BiograFÍA

BIOGRAFÍA: YO MISMO.
Buceando en el arte desde la infancia; primero, la lectura de libros de aventuras clásicos que me traía mi padre; Stevenson, Flinn, Verne, Twain, Defoe, Dumas, Tolstoi…desarrollando en mi una sensibilidad hacia mundos más allá de la realidad, desatando mi imaginación…
El cine y las películas de Los Hermanos Marx, la fascinación por las personas que hacían reír a los demás…la locura creativa como juego…el circo ambulante que llegaba cada tanto a mi barrio…la mujer sin cabeza…
El dibujo en las láminas de Emilio Freixas, dibujar a carbón, en casa aquel libro de Dalí con algunas de sus famosas pinturas como «Sueño de una abeja un segundo antes de despertar», me mantenían boquiabierto ante aquel delirio de libertad…más tarde El Guernica de Picasso, que pinté varias veces para mis familiares, donde se fundían Arte y Política y las tragedias de mis gentes…la humildad…
El trabajo y los trabajadores, la siderurgia, los oficios varios, el bocadillo bajo el brazo de mi padre, la solidaridad, la política de la calle, la real…
La poesía de mi adolescencia, generación del 27, del 98, Miguel Hernández, otra vez tragedia, Lorca, mis primeros recitales, enfrentarse al público junto a un amigo músico…
Quijote y lo quijotesco, asombro por semejante forma de escribir…trabajo de 10 sobre el Quijote en el Instituto…
Mi primer viaje internacional, con 21 años, fue Cuba, más concretamente, Santiago de Cuba, como Lorca; «Si algún día me pierdo, que me encuentren en Cuba»…sacudida a mi corazón y a mi alma toda…cosa seria aquella isla…
Y llega el teatro, por la amistad eterna con mi profesor de Filosofía Eduard Sanz, que en paz descanse o filosofe, una obra: «Extraños en la noche», los cuatro jinetes del apocalipsis, aquello me conquistó para siempre, lo tenía todo en uno; teatro, danza, literatura, música, pintura, oficio… ahí, en ese instante, nací como actor, o más bien, como hombre de teatro…
Los estudios, la carrera, el oficio en el teatro de la calle, recorrer toda la península con sus fiestas y sus gentes tan diversas…el amor al teatro y la amistad a la altura de «Los tres mosqueteros» de Dumas…
Barcelona, el Col.legi del Teatre…tres años, de los mejores de mi vida, cuando las ilusiones permanecen intactas y campan a sus anchas por los rincones de las ciudades…los amores y el amor…
El oficio, la entrada a la adultez, finales de los veintes principios de los treintas…la supervivencia, querer vivir del teatro por encima de todas las cosas, como un iluso Quijote, los sueños, los despertares de la vida, las decepciones, los traidores, los amigos, los viajes, los padres, los hermanos, las parejas, la pérdida definitiva de la inocencia…
El actor maduro, los estrenos, primeros cameos en la Dirección Escénica, y luego la televisión, los aristócratas de la actuación, el dinero, el consumo, más viajes, extranjero en América triunfando, perdiendo, ganando prestigio, todo ese recorrido que curte a un actor de cuarenta y tantos años, y entonces nace un director y un profesor al mismo tiempo…
Las clases, enseñar a los que empiezan, mi amor y mi curiosidad por la Danza, mi desamor con el Teatro, mi Doctorado en Dirección: «La casa de Bernarda Alba danza de sombras», estrenado en el Teatro Nacional de Cuba de La Habana, momentos de alegría, de éxtasis teatral, los amigos, el amor, la vuelta a casa, volver a casa……la ausencia de mi padre, mis abuelos, y algunos irrepetibles amigos que se fueron para siempre…
Hoy el cine llamó a mi puerta, le abrí con gusto y decidimos caminar juntos un tiempo…
y al final La Escritura, esa que siempre tuve en mí, encarcelada, callada, asustada, ahora abrió las ventanas y se puso a contar mi historia, y en eso ando, escribiendo un libro sobre mi trayectoria vital, que alumbre, espero, el nacimiento de un escritor…porque sí, porque sueño con estar solito cuando trabajo, que a veces, las multitudes, no acompañan…
Hágase pues la Luz, sobre todas las personas que siguen buscando la belleza en este mundo terrible…y que sepamos, en nuestro interior, que la luz de la alegría ganará a los tiempos oscuros;
Todo esto es, fundamentalmente, el sentido de mi trabajo en el arte.
Y ante todo, sobre todo y sencillamente:
SOY UN ACTOR..
Fin…